Siento como si tuviera los dedos llenos de mocos: verdes, pegajosos, ni siquiera propios. Un liquido espeso que no me permite escribir por motivos bien estúpidos. ¿Hasta cuándo tanta inmundicia? ¿Por qué no hago algo drástico con estos mocos de mierda que, en realidad, son bien propios?
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