sábado, 19 de marzo de 2011

Equivocados


Íbamos en el auto por un camino de ripio lleno de libres diminutas, arroyos, paredones cordilleranos, cascadas, casas de artesanías con exquisito licor de rosa mosqueta y araucarias. El Circuito Pehuenia. Por ahí andábamos con Esteban y Antonia, que se entretenía en silencio en la sillita de atrás comiendo un pelón entero de a poco, como un ratón, con los únicos dos dientes que tiene. Hacía por lo menos 45 minutos que yo no cuestionaba la manera de manejar de mi marido. Entonces dije:

-Qué increíble el tiempo y energía que dedicamos a trabajar. Horas y horas para llegar a casa con la cabeza quemada. Es como si viviéramos distraídos, alienados.
-Equivocados. Es como si viviéramos equivocados –dijo Esteban

10 comentarios:

Briks dijo...

ud le cuestiona la manera de manejar a su esposo??


es verdad. Alguien, ahí, vive equivocado/a

Patita dijo...

Qué lindo ser mosquito y presenciar in situ esos comentarios. Todavía no me repuse del de los viejitos.
Bien por los cuestionamientos, para qué estamos si no es para eso, eh?
De todos modos, solo pasé para decirte lo linda que está la foto y lo atenta que se la ve a Antonia. Para mí que dijeron "¡Foto!" y ella automáticamente miró la cámara.
Beso grande!

Martín dijo...

Varias cosas, si me permite, y las voy a enumerar en forma de listita:
* El asiento de la nena va atrás del conductor. Asi es mas fácil para el acompañante darse vuelta (para alcanzar el chupete, por ejemplo) con el auto en movimiento.
* Como dijo el Sr. Briks: Le cuestiona a su marido la forma de manejar? La deja? Yo la dejaria, pero "dejar" de abandonar para siempre.
* Si, es lamentable lo mal direccionados que vamos. Equivocados, si.
* Ahora que le veo la cara, estoy seguro haberla olido (N. de la R. en referencia a mi post)
* Le mando un beso, que sigan los éxitos

ani dijo...

Fa. Te tiró una bomba. Lo bueno es que esa persona que comparte con vos la "equivocación" cotidiana, tiene tiempo de darse cuenta. Y de verte. Y de verse. Y verlas, radiantes ustedes. Esa Antonia es una cosita...

Lelé dijo...

Briks: Sí, le cuestiono. Porque maneja bien, pero rápido. Y yo tengo cada vez más miedo a morirme. Así de sencillo. Cómo anda usted? Hace rato que no hablamos.

Patita: Pero muchas gracias! Ahora, sobre los cuestionamientos: creo que hay que hacérselos, sí, pero en algún momento hay que hacer algo al respecto. Si no nos volvemos amargados. Besote!

Shimmy: Va la listita:
* No lo había pensado. Pero tiene toda, toda, toda la razón. Ya lo había notado: usted es un padrazo.
* Tenemos flor de reyertas por el tema manejo. No nos ponemos de acuerdo. Alguien pudo alguna vez?
* Pero mire que no tenia el pelo mojado, eh? Lo suyo sonó a piropo, así que se lo agradezco. Tengo que ir al psicólogo por engreìda?
Ani: Me mató tu comentario. Hoy cuando te mandé el msn ya habías escrito esto? La flauta! La verdad, te agradezco la observación, porque es acertada y me pone contenta. Estamos en cierto proceso de cambio con Esteban. Si te das una vuelta por la oficina te cuento. Beso grande!

Yoni Bigud dijo...

No es como si. Directamente ES. Sin embargo, como han dicho por ái arriba, lo bueno es tener a alguien (o alguienes) para compartir esa equivocación cotidiana.

Así es la cosa nomás.

Un saludo.

Mario Minervino dijo...

Es profunda la cosa. Alguno va a decir que la vida es una equivocación. No sé siquiera si es trascendente darse cuenta ahora, que hay tiempo de, o mañana, cuando ya sea tarde hasta para arrepentirse. Es profunda la cosa, mucho ripio...

Lelé dijo...

Yoni Bigud: Lo de equivocación cotidiana suena a frase borgeana, mire lo que le digo. Hermosa expresión, pero con un tinte drástico. Coincido: mejor equivocarse en equipo.

Mario: Es profunda la cosa, sí. A mí me da vueltas todos los días un rato. Creo que es trascendente darse cuenta ahora. Sí señor. Aguante el ripio. Como siempre, tu participación suma, Marito.

ani dijo...

Sí, sí, cuando ustedme mandó su mensaje yo ya le había escrito. Es la segunda vez que me menciona lo de pasar por su oficina. Le voy tener que hacer caso... A las cuatro, un día de estos ¿es un buen horario? Besos!

Lelé dijo...

Ani: Es muy buen horario! Te espero. Besos!