lunes, 26 de diciembre de 2011

Postales navideñas

  • Antes de anoche en Navidad comimos: calamares a la provenzal (los hice yo), lenguas con cebolla y zanahoria, ensalada de tomate, lechuga y palta; papas con huevo y mayonesa, arrollado de pollo y arrollado de chancho acompañados de puré de manzana. Ensalada de fruta de postre, maní con chocolate, pan dulce y turrón. "Tal como quería Jesús", dijo Liniers.

  • Mi hermano El Jhony va a tener su primera hija mañana. Llega Emilia. 

  • Mi nuevo vecino escucha Radiohead. Qué alegrón. Quiero que su mujer y yo seamos amigas. Y que nuestros hijos jueguen juntos.

  • Recién nomás, mientras escribía el párrafo de más arriba, Antonia, que en febrero cumple dos, se acercó con el pañal en la mano y me mostró que adentro había una bola marrón del tamaño de una pelota de golf. "Caca", dijo.

  • Me pasé todo 2011 tratando de dilucidar cuál es la mejor forma de trabajar sin llorar de estrés y culpa. Muy de revista Ohlala todo el asunto. Van a hacer dos meses que trabajo desde mi casa escribiendo contenido web: blogs y otras yerbas. Ya tengo dos clientes fijos. Más algunas changas virtuales. Desde entonces miro con Antonia Pocoyo, hago yoga y tomo mate en el patio a la tarde preocupada porque el jazmín crezca derecho. ¡Oh La La!

  • Detesto la utilización de Internet (Facebook a la cabeza) como una plataforma para expresar felicidad. Para caretearla, bah. Está bien cada tanto y es lindo. ¿Pero todo el tiempo? ¿Siempre? Me aburre y no lo creo. Sin embargo, releo lo de más arriba y me parece que es lo mismo. Para el caso, tendría que haber escrito algo así:

en casa con la flía. lo mejor! aahhh, q feliz... 
:) :) :) :) :) :)  :) :) :) !!!
About an hour ago vía BlackBerry