lunes, 10 de diciembre de 2007

Hay qué miedo...


Y la verdad es que el acto de asunción a la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner, que fue hace un rato, me generó cierta cosa de desconfianza femenina, como cuando un hermano te presenta a la novia y ella no te gusta, no le crees. Claro que ya la conozco a la señora, a Néstor. Pero hoy es distinto.

Fíjense en la apertura de sus ojos en la foto: a media asta. A mí se me hace que tomó un ansiolítico, pero también puede ser que haya querido demostrar entereza o poder al no sonreir. O ambas cosas.

No sé si estaba armado como para dar sensación en matrimonio, de cotidianidad, pero lo cierto es que Cristina dio señales de neurosis galopante. Estaba tiesa o algo así. Y lo mandoneaba al marido como si le estuviera enseñando a hacer tallarines con la pastalinda.

Miedito, qué se yo...

No hay comentarios: